Rosa Regàs

Me da escozor toda noticia relacionada con el personaje que maldirige una institución tan respetable como la Biblioteca Nacional: Rosa Regàs. Ésta es otro representante de la España de Zapatero: de verbo ampuloso, vacuo, cursi, ridículo e infantil por un lado pero lapidario, demagógico y falaz por otro. Este lado es para la derecha, claro.

Recuerdo con gran enfado cómo esta Sra. (por llamarla de alguna manera) se refería hace unos meses al PP y de paso a todos los que le votan, repitiendo los tópicos que usa la izquierda más reaccionaria tipo Llamazares o Carrillo: que el PP representa a Franco o que son los que mataron a no sé quién, que no creen en la democracia y demás barbaridades que ofenden a cualquier persona mínimamente equilibrada.

Esta señora no sólo se conforma con decir estupideces antisistema como "viva la república" sino que se dedica a dilapidar el presupuesto de la institución que maldirige.

Uno de los problemas que tienen los progres de esta especie es que creen que el dinero público crece en los árboles, que es dinero Monopoly que no cuesta ganarlo o que "no es de nadie" como dice la inefable Carmen Calvo.

Por eso, cuando llegan al poder, lo dilapidan o simplemente se lo quedan muchas veces. Ahora este personaje que junta letras en libros que le publican, insulta a los trabajadores de la Biblioteca Nacional llamándoles delincuentes y que "lo van a pagar" en el Congreso nada menos.

Esperemos que esta señora esté en sus cabales aunque está claro que sus prejuicios procastristas y libertarios le pueden. Pobreza moral llena de prejuicios contra unos. Lamentablemente, eso abunda.